Que Fernando Barrientos haya debutado en Primera de la mano de Gabriel Schurrer no fue una casualidad, ya que ambos habían compartido el vestuario de la quinta división en 2009, cuando se consagraron campeones del torneo de fútbol juvenil. Sin lugar a dudas, haber sido una pieza clave en la obtención de ese título fue determinante para el volante de 19 años, que reemplazará a Ledesma en el equipo que enfrentará mañana a Tigre.
“Cuando el técnico comenzó a repartir las pecheras de los titulares y me dio una a mí, no lo podía creer. Sabía que por la doble competencia iba a comenzar la rotación, pero la verdad es que no me lo esperaba”, explicó con asombro el joven nacido en El Jagüel, partido de Esteban Echeverría. Y a pesar de que suma tan sólo diez minutos en la máxima categoría, Barrientos conserva la cautela como el más experimentado: “Mantengo una tranquilidad bastante importante, aunque espero hacer las cosas bien y contribuir para que consigamos una victoria”.
Conciente de la oportunidad que se le presenta, el Negro, como lo apodaron desde que arribó en 2003 a Lanús, adelantó que no tendrá problemas en jugar en otra posición. “Soy volante central, pero no tengo inconvenientes en desempeñarme por las bandas porque Schurrer ya me utilizó en esa función”, argumentó.
Por otro lado, reveló que es admirador de Riquelme y de Zidane, y enumeró sus cualidades: “Me gusta mucho rematar al arco y estar en contacto con la pelota. Aprendí bastante de Camoranesi, Valeri y Pizarro, quienes tienen una propuesta de juego muy parecida a la que yo pretendo”.