jueves, 28 de marzo de 2013

Regueiro: "No somos los mejores"

La voz de la experiencia. Para el delantero uruguayo, Lanús no es un equipo distinto al resto.

Su vasta experiencia en el fútbol europeo le enseñó que no todo es lo que parece. Traducido al idioma futbolero, lo que Mario Regueiro entiende es que aunque Lanús haya tenido un arranque casi perfecto en el Torneo Final, con cinco victorias y un empate, no significa que será candidato o que ya tiene el título abrochado. "Esto es así: ganás un partido y agarrás confianza, ganás dos y te soltás para jugar más relajado, pero perdés una vez y se puede caer todo", reconoció ayer el uruguayo. Y en esa misma línea de mesura que Guillermo Barros Schelotto les exige a sus dirigidos, agregó: "Tenemos las mismas virtudes que los demás equipos, nada que nos diferencie del resto. No somos favoritos ni tampoco somos los mejores".

Con sus 34 años bien llevados, Regueiro es el jugador más veterano del plantel y una de las voces más escuchadas por sus compañeros. Y como tal, el delantero admitió que la renovación del contrato del Mellizo fue un acierto de los dirigentes. "Lanús se manejó siempre de la misma manera: cuando un entrenador hace las cosas bien y trabaja como se debe, se le renueva su vínculo por mucho tiempo", dijo el punta. Y, sincero, agregó: "El grupo está muy contento porque tiene un DT que ya nos conoce y que tiene una idea de juego que nos sienta muy bien".

domingo, 24 de marzo de 2013

Marchesín, con estilo propio

Sonríe. Marchesín entró en la historia de Lanús por haber mantenido 546 minutos su valla invicta.

Esas calles casi desiertas de San Cayetano -un pueblo de 6 mil habitantes del Sur de la Provincia de Buenos Aires pegado a Tres Arroyos- donde alimentó su sueño de ser un gran goleador como Gabriel Batistuta o Martín Palermo, hoy son testigos de su afianzamiento como uno de los arqueros más destacados del fútbol argentino. Agustín Marchesín aprovecha el poco tiempo libre que tiene para visitar a su familia en su pueblo natal y para recordar esas tardes eternas en las que todavía no impedía las alegrías ajenas.

“Empecé a jugar a los 9 años en una escuela de fútbol de acá y hasta los 13 era nueve. Me gustaba hacer goles y festejarlos con mis compañeros. Pero, con el tiempo, me di cuenta de que no servía para eso porque era bastante tronco. Me fui retrasando hasta que terminé en el arco”, le contó a Clarín el uno de Lanús. Y continuó: “Cuando uno es arquero, la alegría por tapar una pelota o atajar un penal es más personal”.

Con esos 546 minutos que mantuvo su valla invicta, Marchesín entró en la historia del club por haber sido el arquero que más tiempo esperó para ir a buscar la pelota adentro de su arco. “No hay ningún secreto; lo que hay es un buen trabajo de equipo. Trato de mantener el perfil bajo y los pies sobre la tierra. No copio a ningún colega porque me gusta tener un estilo propio”, aseguró. Y sobre la evolución que tuvo desde que debutó en el Clausura 2009, reconoció: “Ahora tengo más personalidad y me siento más líder del grupo. Antes me hacían un gol y me fastidiaba o me bajoneaba, ahora estoy más maduro porque sé que en el fútbol hay revancha en cada jugada. Esto es una ruleta: hoy estás arriba y mañana, no sabés”.

Por el notable nivel que exhibió en estos últimos campeonatos, clubes importantes de Europa, como la Roma, posaron sus ojos en el guardameta del cuadro del Sur. No obstante, Marche (así lo llaman en el plantel) trata de no desviar su atención del Torneo Final. “Intento disfrutar cada día y no ir más allá. Sé que será difícil quedarme porque el club querrá venderme. Si fuera por mí, me quedaría a vivir en Lanús. Pero sería hermoso irme por la puerta grande: con un título”, manifestó.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Tini ganó con la suerte de los principiantes

Todos de River. María Eugenia Baigorri, ganadora de la 2ª fecha del Gran DT, con su familia.

El azar es tan impredecible como el fútbol, a tal punto que no siempre alcanza con la sabiduría o el ingenio para ganar sino que además se necesita una buena cuota de fortuna. O, en su defecto, un compañero que la tenga clara. Eso fue, ni más ni menos, lo que le sucedió a María Eugenia Baigorri, la flamante ganadora de la 2ª fecha del Torneo Fantástico del Gran DT.

“Es la primera vez que juego. Mi hermano Martín nos incentivó a todos en mi casa para que nos hiciéramos una cuenta cada uno. El me dio los consejos para elegir a los jugadores y me ayudó a armar mi equipo”, asegura Tini, una campanense de 15 años que se convirtió de un día para el otro en la gran noticia de su colegio y de su barrio. Y agrega: “Mi familia es muy futbolera y somos todos hinchas de River. Yo conozco mucho a sus jugadores, pero no tanto a los de los otros clubes”. A pesar de su fanatismo por el cuadro de Nuñez, admite que no hay ni siquiera un nombre del conjunto dirigido por Ramón Díaz en su plantel. De hecho, Sebastián Palacios, juvenil delantero de Boca, es uno de sus cuatro suplentes.

Pero eso es un detalle insignificante para María Eugenia, merecedora de los 15 mil pesos de premio. El que tuvo una suerte totalmente distinta fue su hermano Martín. “El quedó medio lejos, ja. Pero igualmente está muy contento porque recibirá su parte como recompensa por haberme ayudado”, dice entre risas la vencedora. Y sí, no es para menos.

martes, 19 de marzo de 2013

Y Pizarro mira a Yaya Touré

Ahí. Pizarro, en el estadio de un Lanús que es líder y crece. Le piden que no tire pelotazos.

Es una pieza clave en el funcionamiento de Lanús y uno de los jugadores preferidos de Guillermo Barros Schelotto. Sin embargo, Guido Pizarro mantiene los pies sobre la tierra y se ilusiona con alcanzar un título que le permita emigrar a Europa con la conciencia tranquila.

-¿Cuál es tu puesto específico? -Soy volante central, pero ahora estoy recostado por la derecha. Me suelto para atacar y colaboro al momento de defender. Mis cualidades futbolísticas pasan por el manejo de la pelota y por hacer que el equipo juegue.

-Antes no pisabas tanto el área, pero ahora es una constante. ¿Cuándo lo modificaste? -En Inferiores jugaba de 5. En Primera tuve tres técnicos que me pidieron cosas diferentes, pero siempre apunté a sumar nuevas cualidades para mejorar.

-¿Qué te pidió cada técnico? -Luis (Zubeldía) me pedía que jugara por el medio porque estaba acostumbrado. Después Gabriel (Schurrer) me puso por la izquierda, pero con más contención. Y Guillermo me exige que organice el juego y que llegue a posición de ataque, con soltura y con libertad para no estancarme.

-En Lanús predomina la idea del buen trato de balón. Y vos sos un ejemplo en eso. -Esas cualidades las arrastro desde chico. Pero todo el equipo trata de jugar y de proponer en cualquier cancha. Y a uno eso le conviene. Además hay varios jugadores que tienen muy buen pie. El juego asociado nos permite generar más situaciones de gol y con mayor claridad. Hasta por momentos se ve una jugada con doce o trece pases.

-Guillermo te da libertad para que juegues tranquilo, ¿no? -Claro. Y me reta cuando tiramos un pelotazo, ja. Cuando tenemos la posesión del balón somos libres de desplazarnos dentro del campo de juego por donde mejor nos sienta, con rotación en los puestos para sorprender al rival.

-¿Estás en tu mejor momento? -Sí. Al igual que en el semestre pasado, tengo más obligaciones y llego más al área contraria.

-¿Qué tenés que mejorar? -Siempre hay detalles para corregir. He tenido muchas chances para convertir y no las concreté. Mi objetivo es mantener el nivel, pero no es fácil prolongar esa intensidad de juego. Agregarle gol a mi estilo sería muy importante.

-Y en ese sentido, ¿quién es tu referente? -Trato de tener un sello propio. Admito que me gusta mucho Yaya Touré, de Manchester City. Los dos somos jugadores altos, flacos y con un juego parecido. Lo admiro y siempre digo que es uno de los mejores del mundo.

-¿Te ilusionás con la Selección? -La esperanza siempre está. Hoy no pienso en eso porque únicamente estoy enfocado en Lanús. Pasé por todas las selecciones juveniles y como todo jugador tengo el sueño de vestir la camiseta de la Selección.

-¿Jugar en Europa es un sueño? -Si me tengo que ir de Lanús, quiero que sea como campeón. Esta es como mi segunda casa y siento que se nos tiene que dar. Ya dos veces quedamos en la puerta y esperemos que esta vez sea la definitiva.
 

lunes, 18 de marzo de 2013

Festejó Guillermo, en el duelo de los amigos

Puro afecto. Martín y Guillermo, sonrisas antes del encuentro entre Godoy Cruz y Lanús.

Atrás quedó esa inquebrantable y recordada sociedad que deslumbró a todo el mundo deportivo con la camiseta de Boca. Esos dos íconos del fútbol argentino que se cansaron de festejar goles y de dar vueltas olímpicas, se enfrentaron ayer por primera vez en esta nueva labor que profesan. Martín Palermo y Guillermo Barros Schelotto volvieron a verse las caras en veredas opuestas, como contrincantes, al igual que en esos clásicos platenses de antología entre Estudiantes y Gimnasia. Esta vez, el encuentro lo vivieron desde el otro lado de la línea de cal, pero con las mismas pulsaciones que cuando eran jugadores. Y fue el mellizo quien se alzó victorioso con el ajustado triunfo de Lanús sobre Godoy Cruz, dos equipos que tratan de manejar con prolijidad la pelota y exhibir ideas ambiciosas.

El lazo que los une a ambos es tan fraternal que hasta dejaron a un costado las apuestas, más allá de que en la previa Guillermo lo desafió públicamente al Titán y le avisó que la cena que compartirían en Mendoza la tendría que pagar el perdedor. “Eso queda de lado; más allá de la relación que tenemos, él hincha por Godoy Cruz y yo, por Lanús. ¿Si tiene que pagarla? En realidad, no habíamos jugado nada”, manifestó Barros Schelotto. Y con relación a los valiosos tres puntos que consiguieron sus dirigidos para afirmarse en lo más alto de la tabla, explicó: “Fue sufrido, creo que no jugamos muy bien. Llegamos varias veces al arco contrario y tuvimos oportunidades para convertir algún gol más”. A pesar de que su equipo es el único que se mantiene invicto (ganó cinco y empató uno), el DT fue crítico con la producción futbolística, pero resaltó la actitud. “Nos faltó juego; la cancha no ayudó mucho, no sé si estaba embarrada o qué, pero no estaba muy buena y no tuvimos el nivel de siempre. Lo que destaco es el espíritu de jugar que tuvieron los jugadores”, señaló.

En el otro vestuario, Palermo se deshizo en elogios para el conjunto de su gran amigo. “Es un rival inteligente, ordenado y tranquilo. Mantiene lo que viene haciendo en estos ocho meses de trabajo. Seguro será protagonista”, ponderó el entrenador de Godoy Cruz. Y marcó las diferencias entre su equipo y el de Guillermo: “Ellos saben lo que quieren y cómo manejar estos desarrollos. Nosotros tenemos poco tiempo de trabajo, pero seguiremos adelante”.

Después de tantas tardes de ver a Palermo celebrar sus goles tras las asistencias de Guillermo, esta vez el que festejó fue el mellizo. Fue el primer duelo de un historial que promete ser extenso.


Chávez y una salida por precaución

Iban 37 minutos del primer tiempo cuando Cristian Chávez tuvo que dejar el campo de juego con una elocuente mueca de dolor y de fastidio. Pero, para su fortuna y para la alegría de Guillermo Barros Schelotto, el volante salió por precaución. El Pochi se entrenó de manera diferenciada durante la semana y viajó hacia Mendoza con una molestia en el muslo derecho. “No es un desgarro, pero salió para prevenirlo”, avisó un integrante del cuerpo técnico de Lanús luego del partido. No gana para sustos el mellizo, quien todavía no pudo repetir el equipo a causa de las lesiones. Carlos Araujo fue el primero en bajarse por un desgarro en el sóleo de la pierna derecha. El lateral sigue recuperándose y jugaría el jueves ante UAI Urquiza, por la Copa Argentina, para empezar a sumar minutos. El otro que está averiado es Oswaldo Vizcarrondo.

domingo, 17 de marzo de 2013

Instituto no sabe cómo salir de su estado de crisis

Sabor agridulce. Aguirre ingresó y empató el partido, pero a Instituto no le alcanzó para ganar.

No logra Instituto salir de sus problemas futbolísticos y calmar la impaciencia de sus hinchas, que ayer estallaron tras el empate 1 a 1 con Crucero del Norte. La crisis que vive el cuadro cordobés radica en el plantel que armó Darío Franco, entrenador anterior y de quien no se tiene un buen recuerdo. Es por eso que el principal anhelo es esperar la finalización del campeonato para rearmar el grupo

A Instituto le sobra empeño, pero le falta juego. Luego del sorpresivo gol de Leonardo Tambussi, el recientemente ingresado Marcos Aguirre puso la pelota contra un palo para igualar el resultado y apaciguar a la gente. Sin embargo, la paciencia se agotó y ante la floja actuación de los jugadores, volvieron los insultos

A Instituto se le consumieron los minutos sin poder ejercer algo importante en Córdoba. Y sus hinchas terminaron muy molestos con la situación que atraviesa el equipo: sin complicaciones con el descenso, pero lejos de los puestos de ascenso y con intenciones de renovarse: el lunes se incorporará el delantero Juan Martín, proveniente de Belgrano. La realidad de Crucero del Norte es más preocupante porque tampoco se le cae una idea y encima no sale de la zona de descenso.  


UAI Urquiza no se cae

No detiene su marcha triunfal UAI Urquiza. En esta oportunidad, su víctima fue San Miguel, al que derrotó ayer por 2 a 0 con goles de Gustavo Sever y Eloy ColombanoCon esta victoria, el equipo dirigido por Guillermo De Lucca llegó a los 55 puntos y estiró a ocho unidades la diferencia que lo separa de su inmediato perseguidor Fénix. 

El otro escolta del puntero, Laferrere, empató 0 a 0 con Sportivo Italiano y desaprovechó la oportunidad de escalar a la segunda posición de la tabla. En tanto que Social Español se impuso por 1 a 0 sobre Excursionistas (gol de Jorge Chiquilito) para ubicarse en la cuarta colocación. Además, Lamadrid empató 0 a 0 con J.J. Urquiza, Argentino de Merlo igualó 1 a 1 con Luján y Liniers goleó 6-1 a Dock Sud. 

La 27ª fecha de la Primera C continuará mañana con dos partidos: Talleres recibirá a Midland, mientras que Cambaceres visitará a Defensores Unidos de Zárate.  

lunes, 11 de marzo de 2013

“Demostramos que somos contundentes”

Ramón y el Monumental. Ayer observó la victoria de River sobre Colón desde un palco.

Ese palco de la platea Belgrano le sienta bien a Ramón Díaz. Primero fue en la 18ª fecha del Torneo Inicial, cuando asumió la dirección técnica de River y observó la victoria de su equipo sobre un Lanús que venía con ritmo avasallante. Y ayer, por esa suspensión que acarreaba por salir tarde al encuentro contra San Lorenzo, celebró y sufrió el triunfo sobre Colón en ese misma silla y rodeado de algunos empleados del club.

El handy que tenía para comunicarse con su hijo Emiliano casi que no fue utilizado en el primer tiempo. Y eso fue gracias al rendimiento que sus dirigidos exhibieron en esos minutos iniciales. Con el 2-0 a favor, el Pelado vio que no hacía falta dar demasiadas indicaciones, aunque en el entretiempo bajó al vestuario para hablarles. En el complemento, el estado de ánimo de Ramón se alteró considerablemente, sobre todo cuando descontó Emmanuel Gigliotti. El riojano aprovechó que la batería de su teléfono estaba casi al tope para realizar los cambios y para ajustar las piezas correspondientes. Sin embargo, River bajó notoriamente su nivel y él terminó sufriendo.

“En el primer tiempo manejamos la pelota y tuvimos la iniciativa. En el segundo, nos faltó la claridad para manejarla. Fue como que los jugadores estaban muy ansiosos para que terminara. Querían dar una demostración de que podían recuperarse, de carácter”, reconoció Ramón. Y agregó: “Igualmente, estamos contentos. Nos da para seguir trabajando. El equipo tiene condiciones, pero hay cosas que mejorar”.

Con estos tres puntos que consiguió ayer, River disfruta de la punta del Torneo Final en soledad, al menos hasta que Lanús juegue hoy ante Arsenal. “Tratamos de luchar por el campeonato. Los partidos son todos duros. Este buen arranque nos dará la oportunidad de trabajar con tranquilidad y de mejorar”, reconoció el DT con semblante reflexivo. Y continuó: “Los resultados son importantes. Estamos demostrando que somos un equipo contundente. Así estamos bien encaminados”.

Le resulta agradable ese palco a Ramón. Por lo menos, hasta ahora se mantiene invicto desde esa ubicación. De todas maneras, él prefiere el banco de los suplentes. “Las sensaciones son distintas al verlo desde la tribuna. Ahí se vive distinto”, cerró.

Mora jugó un partido muy particular y cumplió

Sacrificio. Mora viajó el sábado a su país para despedir a su abuela y regresó ayer para jugar. 

No fueron horas felices las que vivió Rodrigo Mora en la previa al partido contra Colón. El delantero tuvo que viajar el sábado de urgencia hacia su país para despedir los restos de su abuela, fallecida este fin de semana. Al conocer la noticia, Mora abandonó la concentración con el consentimiento de Ramón Díaz para estar junto con sus seres queridos. “Andá y volvé que yo te pongo de titular”, le aseguró el Pelado. Como no consiguieron un vuelo en avión, fue y volvió en auto. No manejó él sino que lo hizo un allegado que lo acompañó. Regresó ayer a las 11 y se sumó al resto de sus compañeros en la concentración para estar a disposición del cuerpo técnico, que cumplió con su palabra y lo incluyó en la alineación inicial que venció al conjunto de Roberto Sensini.

Aunque jugó prácticamente sin dormir, y con la carga emocional que conlleva la pérdida de un ser querido, a Mora se lo percibió bastante activo en el primer tiempo: se movió por ambas bandas y fue un dolor de cabeza para Maximiliano Caire y Bruno Urribarri. De hecho, tuvo participación directa en los dos goles de River: en el primero, Mauricio Romero le cometió la falta que derivó en el tiro libre y en el tanto de David Trezeguet, y en el segundo asistió a Leonardo Ponzio tras desbordar por derecha.

En el complemento, sintió el cansancio lógico y Ramón tomó la determinación de reemplazarlo. Fue sustituido a los 22 minutos por Juan Manuel Iturbe y se retiró del campo de juego con lágrimas en sus ojos. Y como no podía ser de otra manera, recibió una ovación de sus hinchas en reconocimiento al gran esfuerzo realizado.

domingo, 10 de marzo de 2013

Banfield mejoró su imagen

Dividida. Gironi y Rearte luchan por la pelota. El de Banfield participó en la jugada del primer gol.

En ese largo y peligroso camino hacia el anhelado regreso a Primera, Banfield ayer dio señales de vida y avisó que todavía tiene hilo en su carretel. No jugó un gran partido y estuvo lejos de ese buen nivel que exhibió en la primera parte del torneo, pero fue efectivo y consiguió una ajustada victoria sobre un Deportivo Merlo que lo complicó más de lo imaginado. Y, encima, recuperó a su ancho de espadas, a su gran goleador. La referencia es para Andrés Chávez, quien se reencontró con la red y con los aplausos de los hinchas.

Tan especulativo fue el planteo visitante en los primeros minutos que el conjunto del Sur del Gran Buenos Aires se puso en ventaja sin esforzarse demasiado: tras una apertura precisa de Carlos Rearte hacia la izquierda, Pablo López sacó un remate rasante que dejó sin efecto la estirada de Matías Giordano. Ese tempranero gol despertó de su letargo a Merlo, que de la mano del movedizo Leonardo Piris encontró la igualdad rápidamente: Pablo Santillo dio un rebote corto tras un disparo del delantero y Víctor Gómez punteó la pelota para el empate. El equipo de Daniel Garnero asimiló el golpe de la peor manera, la gente se impacientó y ese nerviosismo se propagó entre sus jugadores. El cuadro de Parque San Martín tomó las riendas del encuentro y estuvo cerca de pasar el frente, pero fue repetitivo en sus avances y dejó pasar esa gran oportunidad.

La segunda parte fue testigo de la inesperada resurrección de Banfield, que salió decidido a subirse a ese tren que lo acercaría a los puestos de ascenso. Y lo logró con más actitud que juego colectivo: Fabián Noguera le puso la frente a un centro de Lihué Prichoda para que mermara el nerviosismo de los hinchas. Y la frutilla del postre llegó unos minutos después, cuando Andrés Chávez marcó de cabeza para sacarse la mufa y anotar por primera vez en el año.

De esta manera, el local se quedó con tres puntos que lo pusieron nuevamente en carrera y que le dieron oxígeno a Garnero, cuya continuidad estaba en duda luego de un empate y de dos derrotas consecutivas. Banfield vive. Todavía no tiene el alta médica, pero da señales de vida. Y ahora quiere recuperar el terreno perdido.

jueves, 7 de marzo de 2013

Chávez: “Si la tiramos por arriba nos retan”

Acá estoy yo. El Pochi le mete presión a Guillermo y se entusiasma con ser titular ante Arsenal.

Decidir con la cabeza y no con el corazón. Esa fue la cuestión que lo involucró a Cristian Chávez cuando resolvió marcharse de Boca, el club de sus amores, del que es hincha confeso y cuyos colores defendió durante años, para recalar en Lanús, un horizonte que desconocía completamente. Y el tiempo le ha hecho un guiño al Pochi, ya que se ganó un lugar en la alineación ideal de Guillermo Barros Schelotto y su equipo lidera el Torneo Final con la valla invicta.

“Esta realidad me da la razón sobre la determinación que tomé cuando me fui de Boca, ja. Acá me apoyaron y me atendieron muy bien”, reconoce el volante con una gran sonrisa dibujada en su rostro. Pero enseguida recuerda: “En su momento fue difícil irme porque quedé muy triste, pero la vida sigue y gracias a Dios acá marcha todo de la mejor manera”.

Más allá de que no arrancó como titular, Chávez aprovechó las oportunidades que le surgieron y se mostró comprometido con la idea de juego que trata de plasmar el Mellizo. “No sé si ahora tengo más libertad para jugar. Lo que me pide es que juegue solo y que no pierda la calma, pero que corra y ayude a mis compañeros”, explica. Y agrega: “En el fútbol argentino no se ve muy buen fútbol sino que hay muchos pelotazos. Lanús es la excepción porque viene con un trabajo desde hace tiempo y con la intención de jugar por abajo. Si la tiramos por arriba nos retan”.

Por la suspensión de Mario Regueiro (llegó a la quinta amarilla), el Pochi será titular el lunes ante Arsenal. ¿Habrá cambio de esquema o jugará por la banda? “Cuando llegué, Guille me dijo que me tendría en cuenta por derecha, por izquierda y como enlace. Así que estoy a su disposición”, avisa.

lunes, 4 de marzo de 2013

Peréz García cumplió con “la ley del ex”

No se gritan. El enano de Tigre no festejó su doblete por su reciente pasado en All Boys.

La ley del ex se cumplió al pie de la letra en la tarde de Victoria. Matías Pérez García, autor de los dos goles para el triunfo de Tigre, es muy querido en All Boys por la buena imagen que dejó en sus dos etapas en el club de Floresta (2009-10 y 2011-12).

El volante oriundo de Tartagal abrió el marcador a través de un penal, al igual que en la fecha pasada en la derrota ante River, que le cometieron a él mismo. “Lo pateé al medio porque Nico me conoce”, reconoció luego. Y cuando All Boys amenazaba con pasar al frente, ganó en las alturas a pesar de su 1.65 mts. y volvió a adelantar a su equipo con un frentazo que dejó sin posibilidad de reacción a Cambiasso.

Pérez García no sólo se anotó con su doblete (el primero en su carrera) sino que además fue el eje por el que pasaron todos los avances de Tigre. Y la carta ofensiva más difícil de controlar para los rivales. Aportó movilidad y probó en más de una oportunidad desde media distancia.

En Victoria predominaron los murmullos

Al servicio de la comunidad. Aunque fue a puertas cerradas, hubo un fuerte operativo policial.

Como medida preventiva de la APreViDe para impedir potenciales enfrentamientos entre las dos facciones de la barra brava de Tigre, el partido contra All Boys se jugó a puertas cerradas. Fue por eso que el Monumental de Victoria lució vacío, a excepción del palco de prensa, sector en el que se escabulló más de un hincha camuflado de periodista partidario. Si bien no se entonaron canciones, hubo aplausos cuando ambos equipos salieron al campo de juego, elogios para los jugadores y hasta algún que otro insulto dirigido al árbitro Silvio Trucco.

Los casi 400 policías que fueron parte del operativo estuvieron distribuidos en todas las áreas del estadio y en las adyacencias del mismo. En la platea oficial se ubicaron los dirigentes y los allegados de ambos planteles (eran alrededor de 50) divididos por un pequeño cordón policial. Ahí también se gritaron los goles y se recriminaron los fallos arbitrales.

Cuando el encuentro recién había comenzado ocurrió un episodio singular: un hombre mayor ingresó en la tribuna visitante con un chico y fue sacado por la policía. La pregunta ahora es: ¿Cómo hizo para eludir los controles y el vallado perimetral?

El motivo que llevó a que se tomara esta determinación fue el choque entre los barras de Tigre que terminó con la muerte de Adrián Velázquez, de 40 años, producto de una herida de bala en la arteria femoral que le había provocado una hemorragia. Tigre visitará el domingo a San Lorenzo y sus hinchas se preguntan si podrán concurrir al Nuevo Gasómetro.

viernes, 1 de marzo de 2013

Atrás, hay un puntero seguro

Es gente de Lanús. Marchesín, Izquierdoz y Velázquez ven con sonrisas el presente de su equipo.

Para pelear un campeonato no alcanza con tener una delantera letal o un nueve que sea una amenaza constante para la defensa adversaria. También se necesita una última línea sólida, que sea una muralla y que garantice el cero en el arco propio. Esas dos condiciones son las que le permitieron a Lanús disfrutar de un arranque soñado en el Torneo Final, con tres victorias en igual cantidad de presentaciones, ocho goles a favor y ninguno en contra. Agustín Marchesín, Maximiliano Velázquez y Carlos Izquierdoz son grandes responsables de que el equipo se mantenga con la vaya invicta. Aunque se desentienden del término candidatos y eligen el perfil bajo como les sugiere Guillermo Barros Schelotto, los tres coinciden al charlar con Clarín en que el presente que atraviesan sería distinto si no fuera por el trabajo que realizan en la retaguardia. “Nos conocemos de memoria y cada uno sabe qué lugar tiene que ocupar”, explican mientras posan para la producción de fotos. No hay dudas de que el clima en el Sur del Gran Buenos Aires es el ideal.

-¿Qué se siente ver a Lanús puntero y, sobre todo, con ningún gol en contra?

-Es muy lindo, pero también era lo que siempre buscábamos: mantener el arco en cero. El torneo pasado se consiguió terminar con la valla invicta muchas veces y eso habla bien de nosotros. Pero es una tarea de todo el equipo, no sólo de la defensa (Velázquez).

-El trabajo defensivo que se ha hecho hasta ahora es fantástico porque conseguimos una muy buena solidez. Y es justamente uno de los secretos por los cuales Lanús está puntero (Marchesín).

-Tenemos en claro cuál es el funcionamiento y cuando se produce algún cambio no se siente. En la defensa hay jugadores de muchísima jerarquía. Los mismos delanteros presionan permanentemente en la salida de los rivales. Somos un equipo corto, que se posiciona bien y que tiene posesión de la pelota (Izquierdoz).

-Y si llegan a fallar siempre está Marchesín…

-Ni hablar. Desde hace un tiempo, para nosotros es el mejor arquero del fútbol argentino y lo demuestra en cada partido. Agustín tiene una proyección impresionante porque apenas tiene 24 años. No sabemos cuál va a ser su techo. Siempre sorprende con más cosas (Izquierdoz).

-No recibir ningún gol me da tranquilidad. Estoy con mucho entusiasmo de seguir así para tener la posibilidad de estar en la Selección. Uno que ya estuvo alguna vez sabe lo difícil que es llegar, pero quisiera una nueva oportunidad. Es raro que no haya ningún futbolista de Lanús en el seleccionado local porque es un club que logra continuamente cosas muy importantes y siempre es candidato (Marchesín).

-¿Les da indicaciones el DT?

-Hay jugadores con mucha experiencia y nos entendemos muy bien. La defensa de Lanús es de las mejores del torneo porque hay nombres con nivel de Selección. Además los cuatro del fondo tienen una voz de mando que ayuda mucho a ordenarse. Ellos me dan mucha confianza (Marchesín).

-Y vos, Carlos, ¿creés que aprovechaste tus oportunidades?

-Sí, estoy muy contento de tener la posibilidad de mostrarme. Aunque jugar de lateral derecho no es mi posición, con el correr de los partidos me siento cada vez más cómodo. Soy una rueda de auxilio para el técnico porque al igual que en el torneo pasado me pone siempre que lo necesita (Izquierdoz).

-¿Hay alguna similitud con el equipo campeón en 2007?

-En lo dos casos el promedio de edad en la última línea es muy bueno porque para un defensor, a medida que pasan los años, se siente mucho más confortable en su puesto. Pero ahora hay más tenencia de la pelota y más efectividad a la hora de atacar. Aquel otro era muy vertical con las salidas en velocidad de (Lautaro) Acosta y de (Sebastián) Blanco. Ese equipo te mataba (Velázquez).

-Para vos, Maxi, coronar tu carrera con otro título acá sería ideal…

-Desde que estaba en Ferro me ilusionaba con venir. Incluso, antes de que me contrataran por primera vez, pensé en dejar el fútbol. Estar en este club es un sueño. Desde mi regreso disfruto mucho el día a día. Y la chance de pelear los campeonatos es la frutilla del postre (Velázquez).