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Esa mirada. Caruso Lombardi observa a los jugadores libres en busca de talento para su equipo. |
No
es la primera vez que lo hace. Ya lo había experimentado en sus pasos por
Tigre, Racing y San Lorenzo. Ricardo Caruso Lombardi acrecienta en cada mercado
de pases su fama de ser un verdadero cazatalentos. Al menos
entre los clubes de Primera, sus pruebas de jugadores libres ya son un
clásico. Luego de lograr la permanencia en la máxima categoría, el
entrenador de Argentinos realizó una exhaustiva limpieza en su plantel. Y es
por eso que avisó que necesitaría alrededor de 15 nombres para reforzar su
equipo con vistas al Torneo Inicial. Con lo complicado que está el mercado de
invierno, no tuvo mejor idea que citar para ayer a alrededor de 50
jugadores, para evaluarlos detenidamente.
La
intención de Caruso era realizar una prueba cerrada; es decir, con una lista
previamente consensuada de futbolistas que él ya hubiera dirigido o que le
interesaran. Para evitar intrusos, restringió el rango de edad:
sólo tendrían su oportunidad los que tuvieran entre 20 y 22 años. Pero,
llamativamente, había chicos de 14 y de 16 años, que -claro- no tuvieron su oportunidad,
porque sólo jugaron los que figuraban en la nómina que había armado el cuerpo
técnico.
La
situación se le fue de las manos, ya que decenas de jóvenes
entusiasmados se autoconvocaron en el predio de la UTA en Moreno, donde se
entrena habitualmente Argentinos, para probar suerte. Llegaron en autos
particulares o a pie, con sus bolsitos de mano y sus botines,
listos para tratar de ganarse un lugar. Varios profesionales de las distintas
categorías del Ascenso compartieron el campo de juego con otros que practican
el deporte de manera amateur. Como ese joven que adujo que sólo juega
los domingos con sus amigos. Así de insólita fue la prueba que dirigió
Caruso.
Lo
concreto fue que el mediático DT armó dos partidos divididos en dos tiempos de
alrededor de 45 minutos cada uno. Y observó cada movimiento de los jugadores
que integraron los cuatro equipos que dispuso. Entre los conocidos que se
acercaron para probarse estuvo Kevin Cura, con pasado en Huracán.
Sin
embargo, la nota del mediodía la dio un delantero ecuatoriano. Se
trata de Darwin Caicedo, de 30 años, quien participó de la convocatoria y
además convirtió un gol de cabeza. “Me enteré de esta posibilidad por la radio
y por la televisión”, manifestó el goleador.
“No
estamos para competir con otros equipos en lo económico. Por eso me voy a
dedicar a otros jugadores que no tengan tanto nombre o sean de otra categoría,
pero que rindan igual de bien”, justificó Caruso. Y reconoció que al
menos uno de los que evaluó ayer tendrá su chance de practicar junto
con el plantel profesional.
Parece
mentira que Argentinos, un club considerado como el semillero del mundo y
cuyas Divisiones Inferiores son envidiadas por muchas instituciones, tenga que
buscar sus refuerzos en una prueba de jugadores libres. Pero Caruso sabe lo que
hace.
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