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Tensión. El plantel de Quilmes no se presentó ayer a entrenarse por una abultada deuda salarial. |
Esa tranquilidad que vivía Quilmes con el buen presente futbolístico que atraviesa en
el Torneo Final, con la mini racha positiva de seis partidos sin derrotas que
lo mantiene ligeramente al margen de la zona del descenso, se vio interrumpida ayer por un problema que no estaba en los
planes de nadie. O, mejor dicho, que sorprendió a los dirigentes: los jugadores no se presentaron al
entrenamiento matutino por una abultada deuda salarial que el club mantiene
con ellos. Lo que reclaman es el pago del 25 por ciento de los sueldos de
enero, la totalidad de los de febrero (que vencieron hace diez días), más los
de marzo (que todavía están vigentes, ya que caducarán el 25 de abril). A todo
esto, también exigen el premio por el
ascenso a Primera conseguido a mediados del año pasado, que ronda los 3
millones de pesos.
Preocupados
por la situación, el entrenador Omar De Felippe y sus colaboradores se
reunieron con los máximos dirigentes de la entidad del Sur del Gran Buenos
Aires para que buscaran una pronta solución. Es que hasta que el presidente Aníbal Fernández se juntó por la tarde con
el Secretario General de Futbolistas Argentinos Agremiados, Sergio Marchi, y con Emanuel Trípodi,
capitán y máximo referente del plantel, la intención de los jugadores era
continuar con la medida de fuerza. Pero según le confirmó anoche el vicepresidente de Quilmes, Carlos Coloma,
a Clarín,
llegaron a un acuerdo y los jugadores se
presentarán hoy en el predio del Colegio Don Bosco para entrenarse
normalmente con vistas al compromiso del sábado contra San Martín de San Juan.
Y aclaró: “No hay ningún problema. La
propuesta ya estaba planificada, pero hubo un cortocircuito entre las partes.
Hay por lo menos doce clubes que están peor que nosotros”. Por ahora hay
bandera blanca.
Lanús - Esquema muy ofensivo
Conoce bien Guillermo Barros Schelotto las dificultades defensivas que sufre Boca, próximo rival de este Lanús que marcha como único puntero del Torneo Final. Es por eso que ante la casi confirmada ausencia de Carlos Araujo, quien todavía no se recuperó completamente del desgarro en el sóleo de la pierna izquierda, el Mellizo mantendrá su esquema súper ofensivo con el paraguayo Víctor Ayala en el lateral derecho y con Cristian Chávez en la mitad de la cancha. Lo que también está confirmado es que Carlos Izquierdoz será el reemplazante de Oswaldo Vizcarrondo, quien llegó a la quinta tarjeta amarilla en el empate contra Quilmes.
Lanús - Esquema muy ofensivo
Conoce bien Guillermo Barros Schelotto las dificultades defensivas que sufre Boca, próximo rival de este Lanús que marcha como único puntero del Torneo Final. Es por eso que ante la casi confirmada ausencia de Carlos Araujo, quien todavía no se recuperó completamente del desgarro en el sóleo de la pierna izquierda, el Mellizo mantendrá su esquema súper ofensivo con el paraguayo Víctor Ayala en el lateral derecho y con Cristian Chávez en la mitad de la cancha. Lo que también está confirmado es que Carlos Izquierdoz será el reemplazante de Oswaldo Vizcarrondo, quien llegó a la quinta tarjeta amarilla en el empate contra Quilmes.
Mientras
tanto, el presidente Alejandro Marón
acelerará las tratativas para que Jorge Pereyra Díaz, delantero de 22 años
que llegó desde Ferro por la lesión de un juvenil del plantel, sea habilitado en las próximas horas y
que, de esa manera, ocupe un lugar entre los suplentes.
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